Ser padre en un hogar es un reto, y ser padre en dos hogares puede ser especialmente difícil. Cuando la separación es reciente, puede ser difícil para los padres hacer a un lado sus emociones y poner su atención en las necesidades de sus hijos. La novedad de tener que intercambiar los niños con el tiempo se hace un proceso rutinario y normal. Los niños están aprendiendo de los dos sobre cómo adaptarse a los cambios. Mantener una relación como socios de negocio con el otro padre es mejor para sus hijos cuando intercambian información sobre los horarios o actividades de los niños. La participación del padre sin custodia puede ser difícil, especialmente si la separación fue complicada. Vea el video para ver cómo otros padres han resuelto estos temas.
Esta información puede ayudar para desarrollar o sostener una relación positiva con el padre con custodia y permanecer activo en la vida de su hijo.
Los niños quieren saber cuál persona los va a buscar. Su hijo cuenta con verlo a usted y la presencia de usted le muestra que usted está dando prioridad al tiempo que pasan juntos. No traiga a otra persona que usted apenas ha empezado a conocer. Enséñeles a sus hijos que ellos están en primer lugar, cumpla con los arreglos para el intercambio que hayan hecho mamá y papá u otros amigos/parientes que su hijo conoce y confía.
Los niños se benefician cuando los padres tienen comunicación sobre las actividades escolares y cómo van progresando los niños. Si la comunicación es limitada, información importante no llega al otro padre, tal como las tareas, exámenes que se aproximan, y las calificaciones del niño. Asegúrese que la escuela tenga su dirección actual y números de teléfono. Deje saber a la escuela si usted se mudó o cambió su número celular o de trabajo o dirección de correo electrónico. Haga un esfuerzo por asistir a todas las actividades de la escuela. Mantenga su atención en su hijo.
Aprenda los nombres de los maestros de su hijo y pida una copia (ofrezca pagar el costo de las copias) o pida un enlace al plan de estudio de cada clase, y una lista de proyectos especiales y las fechas que se deben entregar. Esto le ayuda a usted a mantenerse al día con los temas de su hijo, y a ser una fuente de ayuda con los proyectos especiales cuando su hijo está con usted. Por ejemplo, si usted sabe que van a estudiar sobre magnetismo durante el semestre, usted puede preparar a su hijo por adelantado con libros o juegos que se refieran al magnetismo.
La orden de posesión estándar tiene provisiones para ayudar a los padres a permanecer activamente participativos en la vida de sus hijos. Repase la sección de poderes y deberes de la orden de posesión sobre sus derechos para consultar con el personal escolar. Asegúrese de que la escuela lo ha nombrado como uno de los contactos en caso de una emergencia que tenga que ver con su hijo. Informe a la escuela que usted quiere recibir el boletín escolar, estar en la lista para recibir correspondencia y ser parte de otras opciones de medios sociales. Si su orden permite acceso a la escuela, entregue una copia de su orden para que la pongan en el archivo escolar de su hijo. Pida una copia de la política de la escuela sobre el almuerzo con los padres e hijos y repase su orden de la corte también.
Nota Sobre Noviazgos
Cuando usted comienza a salir en noviazgos, las cosas pudieran complicarse. Lea los siguientes consejos para mantener para que las cosas progresen sin problemas.
No le presente un novio o novia a su niño hasta que usted haya mantenido un noviazgo por largo tiempo y esté planeando tener futuro con esa persona. Los niños suelen apegarse emocionalmente muy pronto. Si se apegan a alguien con quien usted tiene un noviazgo, ellos sufrirán si hay una ruptura de la relación. La cantidad de tiempo que hay que esperar antes de presentar a la persona con quien está saliendo varía dependiendo de las edades de sus niños. Una excepción es que los niños menores de cinco años solo deberán saber que usted está saliendo con un amigo(a).
No toda relación llegara a un nivel de compromiso que requiera que sus niños lleguen a conocer a la persona. ¿Estará esa persona por largo tiempo en sus vidas y será una influencia positiva para sus niños?
Es Importante Llevarse Bien
Los padres tienen una difícil tarea, aun cuando ambos padres participan en criar a su niño. Los hijos se benefician cuando parientes adultos responsables están disponibles para tomar el lugar cuando los padres necesitan ayuda. Los horarios laborales de los parientes pueden permitirles buscar al niño en la escuela si se enferma o cuidarlo después de la escuela.
Las relaciones entre familiares lejanos pueden mejorar el sentido de identidad del niño y de pertenecer a algo. Los niños pueden aprender lecciones o habilidades de familiares lejanos cuyas habilidades o intereses pueden ser diferentes a los de sus padres.
Los niños sacan beneficio de pasar tiempo con la familia de su mamá y la familia de su papá. A los niños les encanta escuchar historias de sus padres cuando eran niños. Los niños aprenden sobre las tradiciones de la familia y su historia a través de las historias y fotografías que comparten los familiares mayores. Los niños aprenden sobre cómo resolver problemas observando a otros adultos y niños mientras que hablan y juegan juntos y solucionan problemas.
Consejos para Llevarse Bien
- Concéntrese en compartir hechos e información sobre su niño.
- No comparta información personal al menos que sea relacionada a su hijo.
- Sea respetuoso y cortés en todo tiempo.
- Trate al otro padre como un compañero de trabajo o socio de negocios.
- Cree confianza haciendo exactamente lo que usted dice que hará.
- No suponga que el otro padre sabe lo que usted quiere decir. Diga exactamente lo que usted quiere decir, en todo momento.
- Mantenga sus emociones negativas fuera de la conversación.
Cuando ambos tengan que discutir temas difíciles, programen un tiempo y lugar para hablar a fondo cuando los niños no están, como durante la hora de almuerzo cuando los niños están en la escuela o guardería. Otra opción es programar una llamada de teléfono cuando usted sabe que los niños no van a estar y no van a poder escuchar la conversación. Al hablar con la otra persona y decirle cómo se siente sobre cosas que usted desea ver cambiar, use palabras como “Yo” en lugar de palabras que acusan, tal como, “Tu siempre”. Escuche el punto de vista de la otra persona.
Las comunicaciones por correo electrónico y mensajes de texto pueden ser imprimidas y conservadas por ambos padres, por lo tanto mantenga su comunicación transparente y centre su atención en su niño. Los correos electrónicos y mensajes de textos y otras formas de comunicación o archivos electrónicos pueden ser usados en la corte. Quédese con una copia de los originales y asegúrese de que no haya distorsión de lo que pudiera ser presentado en la corte.
Para los niños muchas veces es difícil cambiar de una casa a otra. Permítale a su hijo tener un tiempo de tranquilidad, si es posible, antes y después de cada intercambio. Su niño puede sentirse triste de dejar al otro padre a pesar de estar contento de ver al otro padre. Es un momento emocionalmente difícil para su niño, que es leal a ambos padres. Ambos padres pueden preparar al niño para el siguiente intercambio hablando del evento y respetando el derecho de su niño a extrañar al otro padre. Esto es lo que usted desearía si el niño le echa de menos a usted.
Tranquilice a su niño durante el viaje entre las casas. Al hacer el intercambio, menciónele al otro padre algo positivo sobre su niño. Los niños se enriquecen con la aprobación de los padres. Si usted felicita a su niño por su más reciente dibujo o presume de su último evento deportivo (¡atrapaste la pelota muy bien!), vea a su hijo llenarse de felicidad.
Hablar directamente con el otro padre asegura que su niño no tendrá que ser un intermediario. Los niños se sienten como intermediarios cuando tienen que pasar mensajes verbales o escritos. Los niños no quieren escuchar sobre asuntos de adultos, tal como dinero, manutención de niños y las razones de su separación. Sin importar su edad, lo único que quieren los niños es no involucrarse en los pleitos de sus padres. Los niños aprenden a comunicarse escuchando cómo hablan mamá y papá. ¿Qué están aprendiendo sus hijos de usted?
Hablar con el otro padre se hace más fácil con la práctica. Prepare y mantenga un horario de contacto rutinario con el otro padre. Hablando de sus niños, especialmente durante momentos emocionalmente difíciles, permite a ambos padres concentrarse en lo que es mejor para su niño. Esto llegará a ser más fácil al paso que ambos se van recuperando de la separación y siguen adelante con sus vidas.
Los niños se enriquecen con las rutinas. El establecimiento de una consistente rutina desarrolla seguridad y confianza. La consistencia también hace más fácil cambiar tiempos cuando los horarios ocasionalmente cambian (si se enferma o tiene que trabajar un turno extra). Ser flexible forma la buena voluntad que permanece con ustedes durante tiempos difíciles.
Hablar con el otro padre sobre la salud, los nuevos intereses, y los problemas o logros de su hijo ayuda a ambos a mantener una buena relación con su hijo.
Para disminuir el conflicto durante la transición entre la casa de un padre a la casa del otro pueden:
- Separar sus emociones de la situación;
- Tratar la situación como una transacción de negocio en una tienda;
- Mantener el intercambio breve y civilizado;
- Aceptar reunirse en un lugar neutral y público si tener a personas desconocidas alrededor lo hace más fácil;
- Quedarse con sus comentarios y opiniones; y
- Respetar el derecho de su niño a tener una relación con ambos padres.
Los abuelos y otros familiares que fueron importantes para su niño antes de su separación pueden ser especialmente importantes después. Los parientes en ambos lados muchas veces son fuente de consuelo para su niño y pueden ayudarle cuando necesita ayuda para un intercambio o para cuidar al niño.
Pague su manutención de niños. Aunque esta no es una razón para que el padre con custodia le niegue las visitas, si no paga puede hacer la situación aún más difícil. Pagar la manutención de niños demuestra el compromiso de un padre a proveer para su hijo.